Conocido por su parte comestible denominada carne, leche y el agua, que son usadas en una gran variedad de platos y bebidas por todos sus beneficios.
De acuerdo con la doctora Joy Dubost, especialista de la Academia de Nutrición y Dietética de los Estados Unidos, uno de los beneficios del coco es que contiene una mezcla de ácidos grasos saturados, algunos de los cuales no tienen efectos adversos sobre los niveles de colesterol.
El aceite de coco contiene un 45% de ácido láurico, el cual posee propiedades antimicrobianas, además de favorecer la elevación de los niveles de coleterol HDL (colesterol bueno). También contiene cerca del 87% de grasas saturadas por lo que ha sido catalogado como un alimento “poco saludable”, sin embargo, un alto porcentaje de estas grasas saturadas son de cadena media lo que la convierte en una grasa saludable. Es ideal para cocinar, ya que soporta altas temperaturas conservando sus propiedades. Una cucharada de aceite de coco contiene 117 calorías.
Siempre que compres aceite de coco, procura que sea Virgen y prensado en frío ya de esta manera se garantiza que mantenga intacta todas sus propiedades.
Por otro lado, el agua de coco es rica en vitaminas del complejo B y vitamina C. Por sus altos contenidos de iones minerales, especialmente potasio que tiene efecto cardioprotector. El contenido energético de una taza de agua de coco es de apenas 45 calorías y es muy usada en bebidas. Por su contenido, es el reemplazo más adecuado para la leche materna (ver info).
Finalmente, la leche de coco, aporta 445 calorías por taza. Es usada mayormente en la elaboración de platillos y postres.
Como podemos ver, el coco, gramo a gramo, es un fruto maravilloso!.
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